Tipos de aceite de oliva
Por La Boodega del Aceite | lunes, 10 de agosto de 2020
Dependiendo de sus características principales y su método de obtención, podemos hablar de distintos tipos de aceite de oliva:
Aceite de oliva virgen
Se obtiene exclusivamente mediante medios mecánicos que no alteren las cualidades del aceite. Posteriormente se trituran las aceitunas y se aplica presión en frío para obtener el aceite, obteniendo de esta forma un producto natural que conserva todo el sabor y las propiedades de las aceitunas y que necesita ningún refinado adicional.
Existe gran variedad de aceites de oliva virgen, atendiendo a su distinto grado de acidez y su contenido en antioxidantes y otros componentes menores. Se pueden clasificar en:
- aceite de oliva virgen extra: es el de mayor calidad y su acidez no debe nunca superar los 0,8 grados.
- aceite de oliva virgen: aunque no llega a la del aceite de oliva virgen extra, su calidad también es muy notable. Tiene una acidez máxima de 2 grados.
- aceite de oliva virgen lampante: no lo has visto nunca en las tiendas porque no es apto para el consumo debido a su fortísimo sabor. Tiene una acidez superior a los 2 grados.
Aceite de oliva refinado
Aquellos aceites de oliva virgen con alto grado de acidez, o que no resulten apropiados porque proceden de aceitunas de poca calidad, o por el procedimiento empleado para su extracción, necesitan someterse a un proceso de refinado que elimina las impurezas pero también su color y propiedades originales, de modo que el aceite obtenido tras el refinado tiene un menor grado de acidez (inferior 0,3º), y tiene muy poco sabor y aroma
Aceite de oliva
Es el más ampliamente consumido en nuestro país y se obtiene de la mezcla de aceite de oliva virgen y refinado, por lo que contiene muchas de las excepcionales cualidades nutricionales de los aceites vírgenes. Su acidez máxima no debe superar 1º.
Aceite de orujo de oliva
Se obtiene aplicando disolventes químicos a los residuos de las aceitunas sobrantes tras haber sido molidas y prensadas. De esta forma se obtiene el conocido como aceite de orujo de oliva "crudo", que no es apto para el consumo. Es preciso refinarlo y mezclarlo con aceites de oliva vírgenes aptos para el consumo humano, para poder consumirlo. Se obtiene así el aceite de orujo de oliva, el menos natural y de peor calidad, cuya acidez deberá ser inferior a 1 grado.